Dilemas de ciberseguridad: Filtraciones de datos
La fiebre prenavideña está en pleno apogeo. En busca de regalos para sus seres queridos, la gente está cada vez más dispuesta a "asaltar" las tiendas en línea
Sean cuales sean sus impresiones, sigue siendo un tema que merece la pena abordar. Especialmente las empresas de nueva creación que basan su valor en un producto o servicio único se esfuerzan por adquirir y mantener un equipo técnico interno.
Esto también es un reto en las empresas familiares y en las que no han tenido antes la necesidad o la oportunidad de trabajar con outsourcing socios. Mientras tanto, las organizaciones maduras apoyan a sus equipos con departamentos enteros formados por socios externos.
No es nada tabú: todo es cuestión de calcular los beneficios y analizar los posibles riesgos.
Agencias polacas de software, pero también ucranianos, rumanos, estonios y otros, han crecido sobre todo con empleados contratados para atender a clientes extranjeros. Este es el paso más fácil en términos de ampliación. Con el tiempo, se les pedirá que presten servicios más completos encargándose de proyectos o de apoyo y consultoría en determinadas áreas clave.
Estas empresas enseñan a sus clientes a aprovechar todo el potencial de la cooperación, convirtiéndose no sólo en un proveedor de servicios, sino también en un socio comercial. Proveedor de servicios informáticossino una tecnología y socio asesor. Muchas veces, en el transcurso de una relación a largo plazo, la relación se vuelve crucial y segura. Sin embargo, los escépticos señalarían el riesgo de que el socio posea activos intelectuales clave y sea responsable de sistemas empresariales críticos.
Al empezar como nuevo socio tecnológicoSi nos ponemos de acuerdo, empezamos por establecer el alcance de la colaboración y nuestras responsabilidades. Supongamos que desde el principio se trata de una relación outsourcing típica, en la que nuestro especialista se une al equipo técnico del cliente. equipo y comienza a entregar algunas de las funcionalidades. Estoy omitiendo aquí la fase de contratación de dicho especialista, que se lleva a cabo cada vez que se realiza un nuevo contrato y se suele practicar a lo largo de todo el periodo de cooperación. Ante todo, el cliente desea participar en la selección de los mejores especialistas, lo que garantiza la integridad del equipo y una cultura de trabajo adecuada.
¿Qué pasa si el especialista contratado para el trabajo no está disponible, cae enfermo, quiere cambiar el proyecto u obtiene una oferta más favorable? A la hora de elaborar las condiciones de la cooperación, cada Organización outsourcing presta atención a la transferencia de conocimientos mediante sistemas específicos, asegurándose de que el entorno de cooperación sea cómodo y seguro para ambas partes.
No se pueden prever todas las situaciones, de ahí la importancia de cuidar este espacio. Otros aspectos de la disponibilidad deben ser gestionados por el proveedor (socio tecnológico), que se encarga de la continuidad del trabajo. Otra forma puede ser sustituir al consultor en cuestión por otro con competencias similares, dándose a sí mismo y al cliente un periodo de transición en el que el nuevo empleado pueda tomar el relevo de su colega.
La siguiente etapa consiste en hacer crecer el equipo a la medida del proyecto del cliente. La creación de confianza desde el principio de la colaboración es un factor clave. Se manifiesta tanto en la fiabilidad del trabajo como en el cuidado que se pone en que la cooperación se contabilice adecuadamente, se mantenga la cultura de trabajo y la política de comunicación clara. Un buen contrato elaborado en una fase temprana da la oportunidad de discutir y acordar estos aspectos.
Los informáticos que trabajan con clientes extranjeros también están verificados a este respecto. Además, un gestor de cuentas siempre está disponible para ayudar a resolver los problemas cotidianos de comunicación. En una determinada fase de la cooperación, suele aparecer el llamado coordinador local del proyecto que, por parte del socio, mejora la comunicación del proyecto.
Cuando la relación permite delegar proyectos enteros al socio tecnológicoEl gestor del proyecto asume la responsabilidad del éxito de la colaboración.
El consultor personal, al igual que todo el equipo en el modelo outsourcing del cliente, se factura por trabajo cualitativo. Cada hora de trabajo se comunica al sistema tanto por el socio tecnológico y el cliente; además, el doble registro permite comprobar las discrepancias.
En función del contrato, el cliente puede plantear el tema de la productividad y la calidad del trabajo de los consultores individuales. El socio tecnológico, velando por la calidad de la relación, garantiza la implicación de sus especialistas y la prestación de servicios al más alto nivel.
Estos son sólo algunos de los puntos que merece la pena destacar para las empresas que buscan apoyo para crear su equipo técnico fuera de su organización de origen.
En una frase, todavía volviendo a outsourcing en las start-ups, tener un gran equipo es crucial, pero el producto es el resultado esperado que construye el valor de una organización joven.
En conclusión, las competencias básicas deben mantenerse en la empresapero el Soporte informático puede ser proporcionada por un socio tecnológico. Esto permitirá desarrollar el producto de acuerdo con la visión de la start-up, ampliar el tamaño del equipo cuando la demanda sea mayor y reducirlo cuando el trabajo de programación se ralentice.